domingo, 18 de septiembre de 2011

Reflexiones de una noche rara.

En determinados momentos de mi existencia, cuando los días pasan trémulos sin formas, pienso si de verdad hemos evolucionado a mejor a lo largo de la historia.

Obviamente, todos me contestaréis que sí; pero yo, al pensar en esta reflexión que me hago muchas veces, no logro afirmar nada concreto.

Hemos evolucionado creando máquinas que nos hacen la vida más cómoda, más abstracta, comunicativa y libre.  Pero hemos retrocedido en la convivencia; en el tú a tú con la otra persona. Hemos llegado a un límite en el que estar con un amigo se nos hace extraño si no hay un móvil delante; si no compartimos con todos (conocidos o no) nuestros momentos más íntimos en cualquier red social: los besos con nuestra pareja, la noche de copas con los amigos, el día de playa, la tarde risas y la mañana de lágrimas. Nos hemos convertido en obsesos en el arte de  darnos a conocer y exhibirnos cueste lo que cueste. Tal vez, como escuché decir a una persona, lo hacemos para que los otros, en un mundo tan individualista, confíen en nosotros y se quieran acercar a nuestro ser. 
No obstante, me parece decadente y verdaderamente perjudicial que los jóvenes y no tan jóvenes se olviden de aquello que les rodea; de ser sinceros sin tener que ocultarse en una pose; de amar sin la superficialidad de los modelos que los medios de comunicación se jactan de airear como algo verdaderamente natural, saludable y creativo. 
Reflexionando en esta noche rara y sin estrellas, me pregunto cuánto hemos evolucionado en la historia y me doy cuenta de que en muchos aspectos, no lo hemos hecho en absoluto. Los primeros tiranos de la historia, los reyes que oprimían al pueblo y que eran derrocados tras una gran revolución del mismo, que clamaba libertad, independencia, democracia e igualdad, los dictadores que sumieron (y aún siguen sumiendo) a los distintos países en decadencia, opresión y muerte, hoy son sustituidos por los medios de comunicación y los grandes mercados que monopolizan absolutamente todo en nuestras vidas. Los países europeos que alardean de su democracia, de su alta eficiencia y de sus ideas progresistas son los mismos que explotan al continente africano por caucho; países de políticos corruptos, manchados por la desidia, por el propio poder que les corroe. Políticos que en vez de solucionar problemas de forma decidida, celebran grandes cenas para debatir las cuestiones que importan a los países que más allá de materias primas están compuestos por personas; políticos que con sus trajes y corbatas, sus miles de coches oficiales y su dinero en dieta y en demás caprichos que no sirven absolutamente para nada, hacen de nuestro entorno algo verdaderamente deleznable. 
Por su parte, los medios de comunicación, más que emitir programas interesantes, culturales y en los que se aprenda algo del mundo, sirven de opio para el pueblo; para hacerlo más ignorante, más carente de valores en una civilización en la que los padres prefieren que  los hijos acudan a  miles de actividades extraescolares para no hacerse cargo o bien dejarlos "enchufaditos" a Internet. 
¿De verdad esto es el progreso?

En esta noche de reflexiones, de pensamientos, me da lástima pensar que el pueblo hoy, sin embargo, se haya quedado dormido. Que no reaccione. Que no sienta. Que no se subleve frente a la explotación de los mercados. Revolución que debiendo ser pacífica, podría sacarnos de un mundo de sombras que no vemos y del que, no obstante, nos costará emerger. 

¿De verdad esto es la evolución...?


Afortunadamente, siempre existen personas que demuestran que hay que confiar en la vida y en el prójimo y su capacidad de superación para ser mejores cada día...

Dedicado a mi amigo Miguel,  que siempre es capaz  de hacerme ver el otro lado de la moneda...  y de confiar en la libertad, la democracia y el pluralismo de las ideas.

 Su blog: www.unatardedecafe.blogspot.com

7 comentarios:

  1. Hay lo has dado, un pueblo inculto es un pueblo fácil de dominar. Eso es lo que está pasando en nuestra sociedad y lo peor es que los que tienen que tomar cartas en el asunto, a parte de la gente de a pie, son esos politicos y empresarios corruptos que lo unico que les importa es su dinero y el de los demas. Mal vamos por este camino del que debemos despertar algún dia.
    un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Vivimos en el mundo de Espinete y don Pimpon... donde todo pasa, y nada pasa...
    Como si nos resvalara... estamos dormidos en demasiadas cosas, mientras en otras... simplemente lo hacemos , o lo hacen al revés... para beneficio de unos y desgracia de otros...
    Cuanta incultura, cuanto pasotismo..

    Así nos va.

    Besos.

    ResponderEliminar
  3. Lamentablemente nos han lavado tanto el cerebro con falsas teorías, con falsas promesas, con falsos cambios, que el pueblo en vez de levantarse contra ellos prefieren cegarse y seguir como si nada ocurriera, a esto fue a lo que nos llevaron y con resignación o sin ella, es lo que hemos estado siguiendo. Saludos.

    ResponderEliminar
  4. En la Edad Media se nos prometía el Cielo Eterno, en el siglo XX se nos concedió el Consumismo Eterno parece que nos encaminamos a una época en la se nos promete el Paraíso Digital donde todos podremos ser felices...
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  5. Hemos ido perdiendo a lo largo del camino, durante los últimos años más, los valores, tradiciones, ideas propias y el carácter que nos hacía únicos dentro de la especie humana. Nos hemos convertido en una caricatura de nosotros mismos en la que sin móvil de última generación, ordenador y moda no eres nadie. Demasiado triste pero cierto.

    Un saludo!

    ResponderEliminar
  6. En esto de la vida en tiene tengo una directriz, es más importante mi vida real que la electrónica, y esta última es solo una muestra de lo que la de carne y hueso es..y lo llevo bien así, por otro lado pareciera que la convivencia de frente a frente está cada vez mas desestimada.

    ResponderEliminar
  7. Las nuevas generaciones son demasiado inmaduras, no tienen criterio propio, quizás por eso no se dan cuenta de lo mal que anda el mundo.

    Respecto al Internet, pienso que por ahora está empeorando las cosas, transformando en robots a la gente, pero también pienso que puede ser utilizado para mejorar... todo depende de quien lo maneje.

    Los medios de comunicación me preocupan mucho, transmiten demasiada violencia y mentira... los niños y jóvenes de hoy son cada vez más insensibles.

    Sobre los gobiernos no tengo nada que añadir.

    Muy buen post reflexivo amigo.

    Saludos.

    ResponderEliminar